Planificación patrimonial: cómo preparar tu herencia en España
¿Qué pasa con nuestros bienes o los de nuestros familiares una vez hayamos fallecido? Esta quizás es una de las preguntas más comunes que nos hacemos a la hora de pensar en elaborar un testamento. Una casa, un coche, los bienes financieros, inversiones, hasta el patrimonio inmaterial o intangible, entre otros, son posibles dejarlos resguardados a través de nuestra planificación patrimonial. Y en este artículo te explicamos cómo debes hacer para preparar tu herencia en España.
En España, la herencia se define como el acto jurídico por el cual una persona dispone del destino de su patrimonio y otros aspectos relevantes para después de su muerte. Este acto, conocido como testamento, es unilateral, personalísimo, solemne y revocable, permitiendo que el individuo establezca cómo serán distribuidos sus bienes y derechos una vez fallecido. Las principales disposiciones legales relacionadas con las herencias están reguladas en el Código Civil, específicamente en el Libro III, Título III, Capítulo II.
De acuerdo con el artículo 744 del Código Civil, pueden suceder por testamento o abintestato aquellos que no estén incapacitados por la ley. Los incapacitados para heredar incluyen a las criaturas abortivas, según las circunstancias del artículo 30, y las asociaciones o corporaciones no permitidas por la ley. El Código Civil establece que los bienes, derechos y obligaciones de una persona se transmiten a los causahabientes y se dividen en tres partes: la legítima, la de mejora y la de libre disposición. La legítima y la de mejora están destinadas a los herederos forzosos, quienes son los hijos y descendientes, padres y ascendientes en ausencia de descendientes, y el viudo o viuda.
El tercio restante, conocido como tercio de libre disposición en la herencia, puede ser destinado a cualquier otra persona o entidad según lo estipule el testamento del difunto. Esta distribución está fundamentada en el artículo 808 del Código Civil, el cual permite a los progenitores disponer de una parte del haber hereditario para aplicar mejoras a sus hijos o descendientes. En algunos casos, como cuando un legitimario está en situación de discapacidad, el testador puede disponer de la legítima estricta de los demás legitimarios a favor del hijo con discapacidad, con ciertas condiciones legales que impiden la disposición gratuita o por acto mortis causa.
En situaciones donde no hay herederos forzosos, el artículo 763 del Código Civil establece que una persona puede disponer de todos sus bienes mediante testamento a favor de cualquier persona con capacidad para adquirirlos. Si no hubiera testamento o herederos legítimos, el remanente de los bienes se distribuiría conforme a las disposiciones testamentarias hechas con arreglo a las leyes, tal como lo menciona el artículo 764. La aceptación de una herencia puede realizarse de manera simple o a beneficio de inventario, y se considera aceptada cuando el heredero realiza actos como vender, donar o ceder sus derechos, según el artículo 1000 del Código Civil.
En Litigal Hispania somos expertos en la gestión de testamentos y asuntos sucesorios en España. Nuestro equipo de abogados está a su disposición para asesorarle y ayudarle a planificar y administrar su herencia de manera eficiente y conforme a la legislación vigente. No dudes en ponerte en contacto con nosotros a través de nuestra página web para obtener más información y asistencia personalizada.
Cómo planificar una herencia en España
Planificar una herencia puede parecer un proceso engorroso, especialmente si no se tiene un testamento preparado. Sin embargo, dedicar tiempo a esta tarea puede prevenir disputas entre los herederos y asegurar que tus bienes se distribuyan según tus deseos. El primer paso crucial es redactar un testamento, un documento donde se especifica cómo se repartirán tus bienes y las condiciones bajo las cuales los herederos pueden acceder a ellos, siempre dentro de los límites legales. Este documento es vital para evitar que la ley y el Estado decidan la distribución de tus bienes, lo que podría no reflejar tus deseos y causar conflictos familiares. Además, el testamento es revocable, lo que permite modificarlo tantas veces como sea necesario según cambien tus circunstancias.
El siguiente paso en la planificación de una herencia es tomar decisiones sobre la distribución de tus bienes, considerando tanto tu situación personal como la de tus herederos.
La planificación fiscal del testamento es crucial para garantizar que los impuestos no reduzcan significativamente la herencia de tus beneficiarios. Es fundamental comprender el Impuesto de Sucesiones y Donaciones (ISD) y las transmisiones mortis causa, así como saber cómo manejar los diferentes tipos de bienes y productos de inversión para minimizar la carga fiscal.
En la legislación hereditaria española tal y como hemos mencionado al inicio de este artículo, la herencia se divide en tres partes: la legítima, destinada a los herederos forzosos como hijos y descendientes; el tercio de mejora, también para los herederos forzosos pero con posibilidad de elegir la proporción de reparto; y el tercio de libre disposición, que se puede asignar libremente. Si no se deja un testamento, estos tercios se distribuirán automáticamente según el Código Civil, lo que puede no reflejar tus deseos específicos y generar problemas entre los herederos.
Además de la importancia legal y fiscal de planificar una herencia, contar con la asesoría de un abogado especializado en herencias como nuestro despacho de abogados en Granada Litigal Hispania es altamente recomendable. Un buen abogado puede ayudarte a recopilar toda la información necesaria y guiarte tanto en el ámbito civil como en el fiscal.
Por el contrario, la ausencia de un testamento obligará a tus herederos a realizar múltiples gestiones y recopilar toda la información sobre tus bienes, derechos y deudas, lo que puede ser un proceso engorroso y costoso. Por ello, redactar un testamento no solo asegura el cumplimiento de tu última voluntad, sino que también facilita el proceso para tus herederos, ahorrándoles tiempo y posibles conflictos. En resumen, una buena planificación sucesoria es la clave para que tu patrimonio se transmita a tus herederos de manera justa y con la máxima optimización jurídico-fiscal.
Cómo hacer un testamento en España
Saber redactar un testamento en España es un proceso esencial para garantizar que los bienes se distribuyan según la voluntad del testador, evitando conflictos familiares y optimizando la carga fiscal.
Es por lo que, antes de redactar un testamento, es crucial realizar un estudio fiscal previo. Este informe analiza la situación financiera y familiar del testador, identificando las mejores opciones para optimizar fiscalmente la sucesión. Este análisis abarca tributos como el IRPF, Impuesto sobre Patrimonio, Impuesto sobre Sociedades, Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, y la Plusvalía Municipal.
Al planificar la distribución de bienes, hay que decidir si es más conveniente hacer una donación en vida o dejarlo todo dispuesto en el testamento. Aunque donar bienes en vida puede tener beneficios fiscales, en muchos casos es más ventajoso dejarlos en herencia para reducir el pago de impuestos. Sin embargo, cada caso debe evaluarse individualmente para evitar problemas futuros entre los herederos.
El testamento puede redactarse de diversas formas, siempre bajo una óptica jurídico-fiscal que asegure la voluntad del testador y minimice posibles conflictos familiares. Es recomendable incluir documentos adicionales como un poder preventivo, autotutela y un testamento vital para cubrir todos los aspectos legales y personales. El poder preventivo designa a una persona que actuará en representación del testador en caso de incapacidad, mientras que la autotutela designa a un tutor en caso de incapacidad judicial. El testamento vital permite especificar las voluntades sobre tratamientos médicos y otros aspectos en caso de no poder expresarlos personalmente.
Además del testamento, es recomendable elaborar un plan fiscal a futuro que contemple acciones para optimizar la fiscalidad en los años posteriores a la planificación sucesoria. Esto puede incluir la transmisión de inmuebles antes o después de la jubilación, analizando el momento más adecuado para no perjudicar la pensión de jubilación.
La vivienda es uno de los bienes que más conflictos genera en una herencia debido a su valor. Dejar la vivienda en herencia puede ser fiscalmente más beneficioso que donarla, aunque puede generar discrepancias entre los herederos sobre su uso futuro. Opciones relacionadas sobre cómo vender la vivienda y vivir de alquiler o contratar una hipoteca inversa pueden ser soluciones para evitar conflictos y optimizar fiscalmente la herencia.
Las inversiones y activos financieros también forman parte de la herencia. En lugar de liquidar estas posiciones, es más conveniente heredarlas debido a la «plusvalía del muerto», que permite a los herederos beneficiarse de un aumento del valor de los activos sin pagar impuestos por las ganancias acumuladas.
Los seguros de vida-ahorro son una herramienta útil para distribuir la herencia. Estos seguros no forman parte de la masa hereditaria y permiten designar beneficiarios específicos, lo que facilita el cumplimiento de la voluntad del testador y ofrece ventajas fiscales.
En el testamento, el testador puede especificar cómo quiere que se distribuyan sus bienes. La herencia se divide en tres partes: tercio de legítima, tercio de mejora y tercio de libre disposición. El tercio de legítima se destina a los herederos forzosos, el tercio de mejora permite beneficiar a uno de los herederos forzosos, y el tercio de libre disposición puede ser otorgado a cualquier persona o entidad.
Es fundamental cumplir con los requisitos legales para que el testamento sea válido. El testador debe ser mayor de 14 años, estar en pleno uso de sus facultades mentales y actuar voluntariamente. Existen varios tipos de testamentos, como el testamento abierto, ológrafo y cerrado, cada uno con sus particularidades.
Una vez redactado, el testamento debe ser validado ante notario para asegurar su legalidad. Es importante guardar el documento en un lugar seguro y asegurar que el albacea designado sepa dónde encontrarlo.
Después del fallecimiento del testador, se deben obtener certificados de defunción y últimas voluntades, hacer un inventario de la herencia, repartir los bienes según lo dispuesto en el testamento, pagar los impuestos correspondientes y registrar la titularidad de los bienes en los registros oficiales.
Es importante dejar claro en el testamento cualquier donación realizada en vida para evitar perjudicar a los herederos. Además, es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado especialista en derecho sucesorio como Litigal Hispania para tomar decisiones informadas y evitar conflictos futuros.
Cómo repartir una herencia en vida
Repartir una herencia en vida, conocido también como donación anticipada, ofrece la posibilidad de transferir bienes a los posibles herederos antes del fallecimiento del donante. Esta opción permite gestionar activamente la distribución de los bienes y puede ser una estrategia útil para evitar conflictos futuros entre los herederos.
Es esencial entender que las donaciones anticipadas son consideradas como adelantos de la herencia y deben respetar ciertos límites legales para asegurar la equidad entre todos los beneficiarios. Según la legislación, no se puede donar más de lo que correspondería a un heredero en la herencia final. Por ejemplo, se puede donar a un hijo hasta el equivalente de un tercio de libre disposición o de mejora, pero exceder estas cuantías podría generar una situación de donación inoficiosa, afectando los derechos de los demás herederos.
La donación en vida es un acto legal mediante el cual el donante transfiere la propiedad de sus bienes al donatario antes de su fallecimiento. Una vez realizada la donación, el donatario adquiere el derecho de uso y disfrute de los bienes, a menos que el donante haya impuesto alguna condición específica.
El donatario simplemente debe aceptar formalmente la donación para que esta tenga efecto. Esta aceptación es un requisito esencial para la transferencia efectiva de los bienes según la voluntad del donante.
Esto puede ser especialmente beneficioso si el donante prevé posibles conflictos entre sus herederos una vez fallecido. Al distribuir parte de los bienes en vida, se puede mitigar la posibilidad de disputas futuras y asegurar que los deseos del donante se cumplan de manera clara y efectiva.
Al momento de realizar una donación anticipada, el donante tiene la opción de establecer ciertas condiciones. Por ejemplo, puede decidir que el donatario solo pueda disponer de los bienes después de un período específico o cuando se cumpla una condición particular, como alcanzar la mayoría de edad, casarse, o completar estudios.
La gestión de una herencia en España involucra decisiones complejas y significativas que pueden impactar tanto a quienes reciben como a quienes llegaron los bienes. Desde la posibilidad de redactar un testamento que refleje fielmente los deseos del testador hasta la opción de realizar donaciones anticipadas para evitar disputas futuras, cada paso debe ser cuidadosamente considerado. Es crucial entender las diferencias entre las donaciones colacionables y no colacionables, así como contar con asesoramiento legal especializado como el que ofrecemos en Litigal Hispania para asegurar que todas las disposiciones legales y fiscales se cumplan adecuadamente.
En nuestro despacho de abogados en España, Litigal Hispania, nos especializamos en la gestión integral de testamentos y asuntos sucesorios en España. Nuestro equipo de abogados está dedicado a ofrecer asesoramiento experto y asistencia personalizada para ayudar a nuestros clientes a llevar a buen término los complejos aspectos legales y administrativos de las herencias.